Centro Universitario de los Altos
Licenciatura en nutrición
DIETA EN MUJER EMBARAZADA.
ALIMENTOS QUE HAY QUE EVITAR
Puede que te sientas confundida sobre lo que debes comer cuando estás embarazada. Además de seguir una dieta saludable, debes evitar ciertos alimentos y bebidas.
Llevar una dieta balanceada durante el embarazo te ayudará a mantenerte saludable y brindará a tu bebé la nutrición que necesita mientras se desarrolla. La importancia de tu dieta radica en que ésta repercute en el sabor del líquido amniótico durante el embarazo, así como en la Leche Materna durante la lactancia. Cuidar tu alimentación durante el embarazo no sólo influye en la formación de tu bebé, gracias a ti, tu hijo aprende sobre la alimentación en su vida futura.
Aquí te dejamos algunos alimentos que es recomendable no consumir durante el embarazo:
- Cafeína: La cafeína es un álcali que cruza fácilmente la barrera placentaria y puede interferir en el crecimiento y desarrollo de las células fetales y compromete la oxigenación fetal, cuando su consumo excede los 300 mg/día, es decir más de 3 tazas al día, por lo que se recomienda limitar su consumo a no más de 1 taza al día. Las gaseosas, golosinas y dulces pueden conllevar a un exagerado incremento de peso; además, no son considerados alimentos saludables.
- Carne poco cocida: La carne cruda o poco hecha es peligrosa en el embarazo debido al riesgo potencial de contraer toxoplasmosis, una infección causada por una parásito que se encuentra en la carne cruda y que puede producir retraso mental, ceguera y epilepsia en el niño. Toda la carne se debe cocinar bien, de manera que no que sangre ni muestre zonas de color rosado. Y después de cocinarla se deben limpiar a conciencia todas las superficies con las que haya estado en contacto la carne.
- Marisco crudo: Y otras especies de marisco que se comen crudas pueden intoxicarte con bacterias y virus dañinos.
- Alimentos procesados: Como las mujeres embarazadas tienen necesidades aumentadas de micronutrientes, es especialmente importante que eviten los alimentos procesados muy calóricos y que prefieran los alimentos enteros naturales muy ricos en micronutrientes, como las hortalizas, los frutos secos, las semillas, las legumbres y las frutas. Los azúcares que se añaden a los platos preparados, la bollería industrial o los refrescos multiplican el riesgo de sufrir obesidad y diabetes gestacional, que puede llevar a complicaciones en el parto y aumenta el riesgo de que el niño tenga sobrepeso.
- Alcohol: Por supuesto, las mujeres embarazadas no deben consumir ni gota de alcohol, que aumenta el riesgo de aborto y muerte fetal. Una dosis muy pequeña ya puede afectar negativamente el desarrollo cerebral y la salud del bebé. El alcohol puede provocar síndrome de alcoholismo fetal, que conlleva deformidades faciales, defectos en el corazón y retraso mental.
- Lácteos sin pasteurizar: Al igual que la leche cruda, los lácteos sin pasteurizar podrían contener listeria, por lo que debemos asegurarnos que todo producto lácteo especifique en su etiquetado que ha sido pasteurizado o elaborado con leche pasteurizada.
- Embutidos: Los embutidos también son otro grupo de alimentos con el que debemos tener precaución durante el embarazo , pues pueden resultar contaminados con listeria durante el proceso de su elaboración. En este apartado se incluyen por ejemplo, chorizo, salchichón, salami, mortadela, fuet, etc.
- Huevos crudos o no bien cocinados: Los huevos crudos o poco cocinados pueden transportar salmonella, una bacteria que puede causar una intoxicación alimentaria conocida como salmonelosis. Durante el embarazo y en especial en casos graves, puede causar un aborto espontáneo o un parto prematuro.
- Pescados: Si una mujer se expone a altos niveles de mercurio antes o durante un embarazo, tanto su salud como la de su bebé se ven amenazadas. Los bebés expuestos al mercurio en el útero pueden sufrir:
Daño grave en el sistema nervioso
Daño cerebral
Dificultades de aprendizaje
Pérdida de audición
- Queso roquefort: En definitiva, cualquier queso blando, tierno y/o suave, y no pasteurizado, no será seguro para comer a lo largo de toda la gestación, aún cuando no sea azul y no contenga moho. Independientemente del tipo de leche que se haya utilizado en su elaboración, como leche de vaca, cabra u oveja.
Dado que estos quesos pueden contaminarse más fácilmente con listeria, una bacteria dañina que puede causar listeriosis, durante el embarazo deben evitarse siempre, dado que se ha demostrado que las embarazadas presentan 20 veces más probabilidades de desarrollarla después de comer un alimento contaminado, en comparación con otros adultos sanos.
Excelente información
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